Conversando entre amigas
ecuatorianas sobre las delicias de nuestra gastronomía, nos desviamos hacia el
tema de los dulces y lo deliciosa que es nuestra pastelería.
Yo les decía pero
nuestra torta básica, es tan rica, o de naranja es deliciosa y otra dijo "y que
me dicen de la torta de novia", a lo que yo respondí:
Nooo eso es harina de
otro costal!
En otras palabras
nuestra torta de novia no tiene comparación, es una torta morena y añejada,
después fuimos agregando dulces a la
conversación y recordamos los huevitos faldriqueros.
Y allí entramos en risa
porque una de ellas nos hizo recordar que en su
“fiesta organizada” comimos huevitos faldriqueros, traídos del Ecuador y
el motivo de la risa era porque a lo que ella llamaba “la fiesta organizada”,
no fue otra cosa que su matrimonio, que lamentablemente terminó en un “abrir y
cerrar de ojos”, pero felizmente ahora ella se ríe de eso; es una etapa
superada en su vida y se refiere a su fiesta de bodas como “una fiesta
organizada”.
A donde va todo esto? Es
que cada vez más… supongo que son cosas de la edad, cada vez más hago uso de
los dichos que escuchaba decir a mi padre.
Y es que disfruto mucho
poder hacer uso de los dichos en una conversación.
Del ahogado el sombrero,
esto lo digo cuando, se recuperó algo, no lo que hubiésemos deseado, pero….
Tras piedras, palos…
cuando encima de que te fue mal, te atacan mas
Barriga llena corazón contento
Dios los cria y ellos se
juntan
A caballo regalado no se
le miran los dientes
Saco e papa
No preguntes por quien doblan las campanas
A buena hambre no hay pan malo
De la ceja al ojo
Mi padre usaba este
dicho “harina de otro costal”, cuando quería denotar excelencia, algo que
estaba muy por encima del promedio,
bueno…. Mi padre era “harina de otro costal”
María Elena
Maggy