Es viernes…noche de libros y “mocha”, fuimos a Barnes & Nobles.
Hay un rótulo a la entrada anunciando que cierran sus puertas el 31 de Diciembre 2011.
Entramos y…mi librería favorita parecía tierra de nadie….libros por el piso, todo en desorden con grandes etiquetas de colores, marcando el 40% o 50% menos, estantes vacíos…..
Me causó pena, toda la gente que se va a quedar sin empleo y el saber que cierran mi librería favorita, donde he invertido tantas horas entre libros y cafés…
Será acaso que la era digital está arrasando con los libros físicos de papel y ahora solo se van a “descargar” los libros…. Yo soy de otra época, de la época que atesoro los libros, los empastes, los colores, las fuentes, me encanta el olor de libro nuevo y ni que decir del olor de libros viejos…. amarillentos por los años y el uso y saber que abrieron la mente a nuevas ideas, o simplemente nos embarcaron en aventuras imaginarias o nos hicieron recorrer el mundo en 80 días, nos llevaron a la profundidad del mar en un submarino, nos hicieron querer al niño que creció entre monos y que su madre gorila, cuidaba con su vida.
Te convertiste en fanática y cómplice de Sherlock Holmes, Ágatha Christie te contagia con su perspicacia, lloras con poemas que han tocado tu corazón y sientes que son escritos para ti….
Es tanto lo que sacas de los libros, que aprendes a respetarlos y amarlos, aún no se como me voy a sentir sin hojear un libro y doblarle la puntita de la pagina en la que tuve que interrumpir la lectura, pero también tengo mucha curiosidad por tener un “Nook”
De aquí a cuantas generaciones ya no conocerán un libro empastado? Y solo lo verán en los museos…. como aquellas cosas que hemos visto que usaban las generaciones anteriores y que fueron evolucionando con la época.
El avance tecnológico tiene sus Pro y contras, hay aspectos muy positivos para el individuo y la sociedad pero también trae sus aspectos negativos, en los cuales se pierde ese toque entre humanos como un abrazo, mirada o caricia que el mundo digital a través de la red del Internet nunca podrá imitar.
Maggy.