Domingo soleado y frío, día precioso para caminar, un cielo celeste y despejado….
Sin los azotes del viento, las bajas temperaturas son agradables para caminar y sentir como el aire fresco llena tus pulmones.
Nos encaminamos al parque, disfrutando la vista de New York.
Detrás de cada persona hay una historia….hay gente leyendo, padres con hijos, madres con hijos, adolescentes, ancianos solos mirando al lago, acompañados pero en soledad o solos pero acompañados de la gente a su alrededor.
Entre los arbustos diviso unos adolescentes comiéndose a besos.
Perros tirando de sus “amos” ….
Y los que vienen a hacer ejercio…. Unos trotando y por allá se ve al grupo de TaiChi.
Parece que los patos se han reproducido, el lago esta lleno de ellos, como chapotean y se divierten en esa agua tan fria brrbrr.
La señora que siempre los alimenta….
Me llama tanto la atención, es tan diminuta y ágil, tiene una carita tan dulce donde sobresalen unos inmenso y brillantes ojos azules, siempre con una sonrisa, los toca, ellos la rodean, ella con sus pequeños brazo, lanza los granos lo mas lejos posible para alimentar a los que se han quedado rezagados.
Está también el hombre de las palomas…
El, las alimenta y ellas se posan en el, en sus manos, cabeza, etc., etc.
Hoy, se me acercó un hombre con su perro y me preguntó, quieres saber más sobre este parque? Por supuesto le respondí, asombrada y el me dijo: Yo era Sargento de la policía, así que siempre recorría este parque, que en su época era hermoso, esa caseta abandonada era una cafetería de 2 pisos, en el lago había botes para remar que se rentaban por $1 y también había los de pedales.
En el invierno, por el lado de allá y me señalo con el dedo al otro extremo del parque, se podía patinar porque la capa de hielo era muy gruesa.
Los desfiles de las escuelas y el festival de San Genaro se hacían aquí!!!
No sabes como era en aquella época, todo cambia…. eso era una belleza!!!!.
Ademas, me dijo, ves ese edificio redondo, que es todo de cristal, así que tiene vista por todos lados, ese edificio era de “Frank Sinatra”, allí vivía su mamá.
Me dijo, bueno…. otro día te sigo contando y se alejó con su perro…..
Continué observando a mí alrededor y allí estaba, la mujer que carga su vivienda en un cochecito….
En un banco, observándonos a todos estaba un muchacho con sombrero y botas de “vaquero”
Y, Siempre vestido de negro y sombrero de fieltro, el señor de Slovenia que no puede comunicarse en Inglés, a veces sonríe, pero siempre está con la mirada en el pasado.
De la gente que siempre va al parque, sólo me falto ver al “chico robótico”, así le digo porque no le se su nombre… tenemos como 15 años de vernos en el mismo parque y nunca hemos cruzado palabra, aparte de un leve movimiento robótico de su cabeza, la inclina un poco, ese es su saludo, yo igual… solo inclino la cabeza y sigo de largo.
Fue muy agradable compartir una fría y soleada tarde con los personajes de mi parque.
Detrás de cada persona, hay una historia…
Maggy